Viernes 29 Marzo 2024

Se mantienen los institutos de gestión estatal y privada y se suma al sistema el nivel universitario UniCABA para capacitar a maestros y profesores de la Ciudad de Buenos Aires. El planeamiento, control y certificación de títulos será ejercido por el Ministerio de Educación. Con el voto mayoritario del bloque oficialista Vamos Juntos, la Legislatura sancionó ayer la ley que define los lineamientos de la formación del personal docente que se desempeña en el ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, cuya instrucción profesional será dada por los ya existentes institutos de gestión estatal y privada y por una nueva universidad específica que se denominará UniCABA.
La flamante normativa establece principios y objetivos de la formación docente así como derechos y obligaciones; apunta a consolidar una cultura de la evaluación mediante la autoevaluación de las instituciones y la evaluación institucional. Por otra parte, crea un sistema de información y estadística, el planeamiento del sistema formador y finalmente no se transfieren los Institutos de Formación Docente -IFD- al ámbito de la UniCABA que no será exclusivamente de formación para la docencia dado que ofrecerá carreras orientadas y vinculadas al perfil productivo y de innovación.
Además, la universidad tendrá autonomía académica e institucional y autarquía económica, financiera y administrativa. Incluso la ley garantiza la validación y acreditación de títulos y carreras y la articulación con los IFD a través de ciclos de complementación curricular para sus egresados y alcanzar el grado universitario con contenidos relacionados con las políticas públicas jurisdiccionales.
La norma se aprobó en base a un despacho conjunto de mayoría de las comisiones de Educación, Ciencia y Tecnología y de Presupuesto, Hacienda, Política Tributaria y Administración Financiera, presididas por los legisladores oficialistas Maximiliano Ferraro y Paula Villalba, respectivamente. En tanto, la oposición presentó tres despachos en minoría con diversos cuestionamientos y una propuesta en común: el archivo del expediente. Los dictámenes opositores fueron uno de Unidad Ciudadana, otro de los bloques Peronista, Evolución y Socialista, y un tercero del PST-FIT y FIT.
El proyecto debatido y votado este jueves en sesión ordinaria tuvo un largo y discutido tratamiento en comisión durante 2017 y 2018. Inicialmente se trató de una iniciativa de la Jefatura de Gobierno que creaba la UniCABA y absorbía la función actual de los 29 institutos de formación. La oposición de rectores y docentes, estudiantes y gremialistas, obligó a una "reformulación" del proyecto, como lo definió el diputado Ferraro, dejando atrás la idea de cerrar los establecimientos tradicionales - algunos de ellos centenarios - que forman profesores/as de distintas especialidades y maestros/as primarios o iniciales.
"El objetivo de la presente ley es definir los lineamientos de política educativa para la formación docente del sistema educativo local, a fin de jerarquizar y valorizar la formación docente en un todo de acuerdo con la normativa federal y nacional aplicable, así como las facultades que a esta Legislatura le confiere la Constitución de la Ciudad", dice uno de los párrafos de los extensos y puntillosos considerandos elaborados en la comisión legislativa de Educación.
La norma aprobada tiene 30 artículos, su carátula es: "Ley de la Formación Docente del Sistema Educativo y Creación de la Universidad de la CABA" y se estructura en tres títulos denominados: De la Formación Docente, Del Planeamiento, Evaluación, Información Estadística y Acreditación de la Formación Docente; y de la Universidad de la CABA.
La primera parte define que "a los fines de la presente ley, se entiende por Formación Docente al sistema formador de docentes para todos los niveles y modalidades del sistema educativo de la Ciudad y al conjunto de ofertas de formación docente inicial y continua del nivel Superior", aclara el segundo artículo. El Capítulo II señala los fines y objetivos de las políticas educativas para la formación docente, estableciendo como responsable primario al Ministerio de Educación e Innovación porteño. Allí se encuentra el requisito indispensable de acreditación y registro de las instituciones de educación superior.
Imagen: El Recinto de Sesiones desde la Galería Alta durante el desarrollo del debate.