Jueves 28 Marzo 2024

NaveLa Dirección General Patrimonio e Instituto Histórico y el Ministerio de Cultura de la Ciudad, invitan a la inauguración de la exposición "Los misterios de un naufragio en el Río de la Plata", el jueves 27 de septiembre a las 11h en Espacio Virrey Liniers (Venezuela 469).

La muestra podrá ser visitada de martes a domingos, de 14 a 19 hs, hasta el 2 de diciembre.

El hallazgo

El siglo XVIII es e l momento de mayor desarrollo para la arquitectura naval de Occidente.

Pero es el momento menos estudiado en lo que hace al diseño naval de mercantes de porte mediano y de navegación oceánica.

En la confluencia de las calles Juana Manso y Rosario Vera Peñaloza de Puerto Madero se realizó el hallazgo de los restos de una embarcación de madera a 10 metros de profundidad en la tierra, producto de los trabajos de excavación del emprendimiento inmobiliario Zencity.

El pecio hallado nos aportará ese conocimiento menos registrado en los documentos escritos.

La investigación arqueológica sobre este hallazgo fue estructurada en lo que denominamos “Arqueología de Rescate”, a través de la realización de dos etapas concretas y sucesivas.

Por primera vez en la Arqueología Argentina tenemos la posibilidad de estudiar y analizar, a través de los restos materiales, la carga de un mercante español llegado al puerto de Nuestra Señora de los Buenos Aires, posiblemente durante l a segunda mitad del siglo XVIII.

Objetos encontrados

En ese momento, el arma naval por excelencia es el cañón de hierro fundido de ánimalisa y avancarga, funcional, desnudo de leyendas, escudos y adornos superfluos y que nos anuncia el arma de producción en serie.

Los cuatro cañones hallados en los restos del pecio estaban en posición de estiba en la bodega del barco, por lo que pensamos se traían al Puerto de Buenos Aires para ser comerciados.

Del total de elementos hallados se destaca una importante cantidad de botijas enteras y fragmentadas de diferentes capacidades, modeladas con el uso de torno, ubicadas en los sectores de estiba de la bodega del barco.

Se encontraron además objetos de uso cotidiano como pipas, utensilios de labranza y personales que formaban parte de la carga.

También se hallaron elementos de fijación, consistentes en clavos, tachuelas y pernos de ligazón, componentes fundamentales en la construcción naval.

Todos los elementos analizados son de hierro forjado. Respecto del pecio, los estudios de Anatomía Vegetal nos llevan a la conclusión de que se utilizó para su construcción el género Quercus L. (Fagaceae), que se conoce con el nombre vernáculo de roble.

La estructura completa de la embarcación ha sido reenterrada en las condiciones en las que se conservó por tanto tiempo y bajo los estándares de control que se exigen internacionalmente, ya que no hay opciones técnicas para mantener lo expuesto.