Una fortuna de que desbaraten acciones ilegales sobre los animales, mientras que una gran parte de la sociedad disfruta de observar aves, muchos a través de los COAS (Club de observadores de aves) otras personas por suerte no son tantas, se dedica a la comercialización ilegal de especies, pero vale recordar que, para que se pueda vender, debe existir gente que compre, con lo bonito que es ver a los animalitos en su hábitat y a los pájaros fuera de las jaulas, volando y cantando en libertad, la pandemia por el Covid nos ha invitado a todos a reflexionar sobre muchos temas, este es uno importante, dejar en paz a la naturaleza y a sus habitantes, no invadirlos, no sacarlos de sus hábitat.

La Policía de la Ciudad desbarató en las últimas horas dos criaderos ilegales de animales y rescató 60 especies en condiciones insalubres que eran comercializadas en un puesto de venta del Barrio 31 de Retiro. Estos procedimientos se realizaron por medio de una investigación de la División Delitos Informáticos Complejos de la Policía de la Ciudad, que detectó dos domicilios en Retiro e Ingeniero Budge, donde se criaban a los animales.

Los efectivos policiales establecieron que en un puesto callejero del complejo habitacional del Barrio 31 se ofrecían animales en malas condiciones y con riesgo sanitario para la comunidad.

Por este motivo, los oficiales informaron de la situación a la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental, a cargo del doctor Carlos Rolero Santurián, quien ordenó que se realicen tareas de campo corroborándose el comercio de distintas especies como loros, cotorras, jilgueros dorados y tortugas de tierra.

Gracias al trabajo de los efectivos, se determinó que los involucrados utilizaban dos domicilios, uno en la Ciudad de Buenos Aires y el otro en Ingeniero Budge, en Lomas de Zamora, Provincia de Buenos Aires.

Conforme con la información recolectada, el magistrado interventor ordenó dos allanamientos simultáneos en los domicilios involucrados. En el primero de ellos, dentro del Barrio 31, se encontraron 5 loros, 2 cobayos, 2 tortugas de tierra y una tortuga de agua, mientras que en la casa de Ingeniero Budge se secuestraron 50 cobayos, algunos de ellos congelados.

Todos los animales fueron trasladados a la Reserva Ecológica Costanera Sur y ONG Pájaros Caídos, donde quedaron a disposición del fiscal.

Como resultado de los operativos, se identificó a cinco personas de nacionalidades peruana, paraguaya y dominicana en la vivienda del Barrio 31, mientras que en el domicilio bonaerense había tres individuos: dos argentinos y un peruano.

Del operativo participaron personal del Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ), la Dirección General de Fiscalización y Control (DGFyG), inspectores y veterinarios de la Subgerencia Operativa de Recuperación y Control del Ecosistema de la Agencia Control del Animal, la Unidad de Irrupción, Unidad de Dispersión y médicos veterinarios de la División Perros de la Policía de la Ciudad.

Intervinieron, el Juzgado Nacional Penal, Contravencional y de Faltas Número 22, a cargo de la doctora Gabriela Zángaro, y el Juzgado de Garantías Número 3 de Lomas de Zamora, bajo la titularidad del doctor Gustavo Caig.