Visita guiada al Jardín
Sábado 3 de julio / 15.30 - 17.30hs
Museo de Arte Español Enrique Larreta - Juramento 2291
Informes. Área Educativa (54.11) 4784-4040 / 4783-2640 int. 18
Lunes a Viernes de 10.00 a 18.00hs
Los jardines han sido lugares de inspiración desde tiempos inmemoriales. Refugios de poetas, músicos; cómplices de los enamorados, han sido poblados por los sueños de los hombres de dríadas, duendes, especies fabulosas y laberintos.
El jardín andaluz del Museo de Arte Español Enrique Larreta también tiene sus historias.
Invitamos al público a contar y compartir las suyas en nuestro jardín.
Un testigo En la postal del año 80 – mil ochocientos ochenta y tantos- sólo aparece la vieja fachada de la “quinta de los Anchorena”. Yo, quiero creer, estoy detrás de esas paredes, era solo un retoño por entonces. Apenas si recuerdo el rostro de Mercedes Castellanos de Anchorena, sí tengo presente sus manos, unas manos frías que se confunden en mi memoria con la humedad de la tierra, esta tierra.
Fue en otoño; pasó el tiempo. La mayoría de los rostros son sombras.
Pero entre todos ellos uno se va precisando. Un hombre delgado, que al observarme cae en hondas meditaciones. Fue él quien lo cambió todo.
Enrique Larreta hizo de la casa un palacio y de la quinta un jardín Andaluz.
A mí alrededor nacieron y murieron flores de todo tipo y color. Los pájaros revoloteaban a toda hora Larreta salía al jardín y disfrutaba de la naturaleza. Yo lo observaba en esas largas jornadas de meditación bajo el tibio sol del verano. Tal vez soñaba con Ávila, ciudad donde transcurre su novela más famosa:
La gloria de Don Ramiro Luego llegaron los nietos.
Ya no tengo la fuerza de la juventud, pero conservo la memoria en mis raíces. Fui testigo de los tiempos. De la ciudad y de los árboles soy quizás el Ginkgo Biloba más antiguo.
Un nuevo otoño palidece mis hojas Texto: RV - A JC Fotografías: Juan Sebastián Marino