Fue probado con buenos resultados, un avance determinante en la lucha contra el colesterol, un desarrollo estadounidense fue aprobado como nueva droga para personas que no responden a los tratamientos convencionales contra el colesterol alto. Llegaría a la Argentina en 2 años.
Agencia CTyS - Está comprobado que las personas que sufren de colesterol alto son más propensas a padecer infartos o accidentes cerebrovasculares. En las últimas tres décadas, las terapias con estatinas demostraron ser muy eficaces, sin embargo cerca del 10 por ciento de los pacientes con colesterol elevado no responden a este tratamiento.
En ese contexto, un nuevo desarrollo estadounidense echa luz sobre estos pacientes tan comprometidos, ya que la nueva droga inyectable denominada alirocumab logró reducir hasta en un 60 por ciento el llamado colesterol "malo" a este tipo de pacientes disminuyendo notablemente los riesgos que conlleva.
La Food and Drug Administration aprobó el viernes esta nueva droga producida por los laboratorios Sanofi (Francia) y Regeneron (EEUU) y la misma será vendida en una lapicera de dosis única o en una jeringa para que los pacientes se la suministren cada dos semanas.
Este nuevo medicamento, cuyo nombre comercial es Praluent, es indicado para grupos específicos de pacientes con colesterol alto, como las personas con una forma hereditaria denominada hipercolesterolemia familiar heterosigota y quienes padecen la enfermedad cardiovascular ateroesclerótica.
El nuevo fármaco aún no está aprobado en la Argentina, por lo que se estima que podría llegar al país en unos dos años. En tanto, en Estados Unidos ya se generó polémica luego de que trascendió su precio de producción: ¡14.600 dólares por año!
El colesterol es una sustancia grasa que circula en sangre, y es indispensable para el funcionamiento del organismo. Es segregado por el hígado, y también se incorpora a través de la alimentación (en especial, carne y huevos). Puede presentarse como lipoproteínas de baja densidad (colesterol LDL o 'malo') y lipoproteínas de alta densidad (colesterol HDL o 'bueno').
De esta manera, las terapias con estatinas ahora contarán con un nuevo aliado en la lucha contra esta afección.