Aunque les cause asombro porque ya no hay muchas, les cuento que a mi pequeño patio pero lleno de plantas comenzó a visitarlo una linda Mariposa, a la que yo veo por las mañanas bien temprano, dicho así el tema no tiene gran relevancia, pero también comencé a notar que aparecieron unas feas orugas con espinas en el cuerpo, que con una voracidad increíble se las empezaron a comer.
Aquí fue el momento en que empecé a combatirlas, primero las sacaba de las plantas con un papel, pero después la cantidad me supero y emplee un conocido aerosol que no le hace nada ni a los animales, ni a las plantas, mientras dia tras dia, me preguntaba de donde salieron estos bichos que están destruyendo todo.
Finalmente el secreto de las orugas en mi patio fue develado, porque hete aquí que observando las plantas, encontré en las hojas del malvón unos huevitos negros muy chiquitos, y me di cuenta que la mariposa visitante del patio, venia a dejar sus huevos en mis plantas, los que con rapidez se convertían en las orugas que se las comían.
El final de este breve relato es que sigo en el combate, pero deje que una oruga terminara con su ciclo y ahora un una ramita del Mburucuyá cuelga una Crisálida, que por lo que he leído, el proceso para convertirse en mariposa dura unas dos semanas.
Si no fuera porque mi jardín estaba siendo devastado por las orugas, hubiera dejado que se llenara el patio de nacimientos de lindas mariposas, pero como siempre en la vida, existen esos momentos en donde uno debe tomar decisiones, debe elegir.
El porque de la elección de este patio de Villa Pueyrredon de la hermosa mariposa no lo se, debe ser porque sabe que amo las plantas, los animales, la naturaleza toda, cooperando por una Ciudad verde, y aunque no lo crean de mi patio saldrá a recorrer la Ciudad una bonita mariposa.