Hoy estamos dando la vuelta a la última página del calendario del año 2014, los días se han ido de forma ordenada, sin prisa, pero sin pausa, algunos le estarán agradecidos a este año que se va y otros estarán impacientes porque termine, todo depende del trato que tuvieron las jornadas de este año que se retira con cada uno.
Para los que el trato no ha sido bueno, comienza mañana el 2015 cargado de nuevos bríos, de la esperanza que traiga nuevos aires, que las cosas mejoren, con salud, paz, proyectos, y trabajo, para los que el 2014 fue un buen año los deseos serán que se repita.
Comienza para los que participan o se muestran interesados en la política, un año electoral, que seguramente será bastante entretenido y tedioso para los que se hartan de las campañas de los candidatos, cada uno en sus lugares votara su próximo gobernador, veremos quien será el próximo presidente y en la Ciudad quien será el futuro jefe de gobierno, se viene un año movidito.
Lo que me atrevo a pensar en que todos estaremos de acuerdo que conservar nuestra democracia es uno de los mayores logros que hemos tenido a lo largo de estos años, y el deseo de conservarla se arraigo en la mayoría, con sus imperfecciones, con todo lo que hay que mejorar, es lo mejor que nos pudo haber pasado.
Desde aquí les deseamos a todos nuestros lectores, todo lo mejor para el año que en pocas horas estará por comenzar, que despidamos el año con mesura, con menos pirotecnia, pensando que con el dinero que se invierte en ella se podría ayudar a personas que lo necesitan, sin excedernos en la ingesta de bebidas, y a no conducir alcoholizados.
Mucha Felicidades.