Jueves 28 Marzo 2024

A esta altura creo que ya se tomó conciencia del cambio climático, aunque algunos todavía lo dudan, si uno conserva recuerdos se da cuenta de la cantidad de especies que han desaparecido, sobre todo en las ciudades, los factores son muchos, la actividad humana ha tenido mucho que ver, hay especies que ya no se ven más ni en pleno campo, como bien se dice los árboles son los pulmones del planeta, plantar para conservar la flora y fauna silvestres, así que siempre se celebra cuando se sabe que está prevista una plantación de especies nativas del vivero de la Agencia de Protección Ambiental, (barrio de Villa Soldati, Comuna 8), en el Reservorio natural del Arroyo Cildañez, un nuevo humedal recuperado del Parque Indoamericano.

Esta actividad forma parte del Plan Hidráulico. El reservorio es un nuevo humedal recuperado para mitigar el riesgo de inundaciones y potenciar la biodiversidad natural. Forma parte de la estrategia de adaptación al cambio climático basada en el respeto por la naturaleza y el disfrute.

El Parque Indoamericano es el segundo más grande de la Ciudad de Buenos Aires, y está ubicado en la zona Sur entre las avenidas Escalada, Castañares, la autopista Cámpora y las vías del ferrocarril Metropolitano. Sus aproximadas 130 hectáreas, que integran los barrios de Villa Lugano y Villa Soldati, hacen que sea considerado de escala regional.

Vivero de flora autóctona

La flora autóctona mantiene infinidad de vínculos con otras especies con las que interactúa. Esta es la base de la biodiversidad de la Ciudad de la que se desprenden los servicios ecosistémicos indispensables para mantener la calidad de vida de los porteños.

El Vivero de Flora Autóctona funciona en la sede del Centro de Información y Formación Ambiental (CIFA). En él se producen árboles, arbustos y herbáceas.

Este proyecto promueve la siembra, cultivo, desmalezado, poda y cuidado de cada ejemplar hasta alcanzar el desarrollo óptimo para su posterior plantación.

Para mantener la producción se trabaja en conjunto con áreas protegidas y sitios naturales (reservas naturales y espacios verdes).

En esta actividad participa personal técnico, becarios y vecinos.

Cuando las semillas alcanzan el tamaño adecuado son incorporados en el espacio verde elegido.

De este modo, propiciamos la recuperación de la naturaleza propia de las ecorregiones del espinal, el pastizal pampeano y el delta e islas del Paraná.