Allá lejos en el tiempo quedo la época en que sacábamos la bolsa de basura a la vereda, luego se pasó a los canastos que eran más higiénicos ya que era poco probable que algún animalito la rompiera y quedara la basura tirada o desparramada, la gran solución en la Ciudad comenzó con los contenedores, no sin antes producirse algunos problemas, algunos de gravedad sobre donde estaban ubicados, o sea nadie quería un contenedor frente a su domicilio, pero el tiempo fue pasando y esos inconvenientes quedaron atrás, ya todos los vecinos se acostumbraron y la verdad que es mucho más higiénico y cómodo.
Sin embargo ahora las quejas vecinales pasan por otro lado, que muchas veces las empresas encargadas del tema dejan contenedores a los que no le funciona el pedal para levantar la tapa, o que no le realizan en cambio o limpieza correspondiente, por otro lado algunos vecinos se quejan de que en algunas cuadras dejaron tres en lugar de uno y faltan en la cuadra siguiente, como sea debemos reconocer que todo funciona mejor, lo demás se va solucionando, siempre con el control vecinal que eleva los reclamos.
Otro de los temas pendiente son los contenedores verdes, que debería haber más, en algunos caso se encuentra uno por manzana, y en otras directamente no hay, si bien el vecino puede llevar lo reciclable a los puntos verdes también, no todos pueden hacerlo.
Centro de Reciclaje de la Ciudad
Es el primer centro de Argentina que reúne cinco plantas de tratamiento de residuos y un centro educativo.
Las plantas que se encuentran en el Centro de Reciclaje de la Ciudad son: áridos, orgánicos, restos forestales, PET, MRF (Centro verde) y un Centro educativo.
Los escombros que se juntan mediante la recolección programada del 147 y de empresas volqueteras ingresan a la planta de áridos del CRC dónde luego de todo el proceso salen convertidos en granas y cascotes que son reutilizados para ser parte de nuevas obras de construcción.
Lo mismo sucede con los residuos orgánicos que son todos aquellos restos de comida de grandes generadores como por ejemplo hoteles, hospitales, cadenas de restaurantes, entre otros. Estos ingresan a la planta de orgánicos y se transforman en enmienda para enriquecer los suelos de parques y plazas de la Ciudad.
Los restos de las podas que se realizan en la Ciudad, es decir las ramas y troncos que recolecta el 147, también ingresan al CRC pasando por la planta de forestales. Es ahí donde se cortan y trituran de diferentes tamaños para terminar en material para estructuras de suelos.
Las botellas PET tienen una planta especialmente para ellas donde se lavan, se separan por color y se trituran hasta convertirse en escamas plásticas. Con todo este proceso terminado salen del CRC con un valor agregado, para después ser ropa, botellas nuevas, baldes y escobillones.
Todo el papel, cartón, plástico, vidrio y metal que se recolecta en el interior de los contenedores verdes para reciclables de la Ciudad van al Centro Verde Automatizado. Luego de pasar por la máquina separadora se enfardan según el tipo de material y finalmente la cooperativa de Recuperadores Urbanos los puede vender para que se conviertan en nuevos objetos.
Visitando el CRC también se puede conocer el Centro Educativo que es un lugar donde se puede aprender de forma simple, entretenida y significativa los conceptos y las prácticas para la reutilización, valorización, reciclaje y compostaje de las diferentes fracciones de los residuos sólidos urbanos.
El Centro de Reciclaje de la Ciudad está ubicado en la calle Ana María Janer 2750, en Villa Soldati.
Visitalo con tu escuela
Las visitas para escuelas se realizan a diario, en doble turno, de lunes a jueves, duran dos horas y media y requieren inscripción previa.